top of page

Tiroiditis de Hashimoto


Antes de explicar sobre la Tiroiditis de Hashimoto debemos conocer la Glándula Tiroides y su función

La glándula tiroides es un órgano con forma de mariposa ubicado en la base de su cuello. Libera hormonas que controlan el metabolismo. Las hormonas tiroideas regulan las funciones vitales del cuerpo, que incluyen la respiración, ritmo cardiaco, peso corporal, fuerza muscular, ciclos menstruales, temperatura corporal, niveles de colesterol, entre otros.

Las estadísticas muestran que las enfermedades de las tiroides son mas comunes que la diabetes y enfermedades cardiacas. Existe una fuerte relación genética entre las enfermedades de la tiroides y otras enfermedades autoinmunes. Las mujeres son siete veces mas propensas a sufrir hipotiroidismo.

Existen varias enfermedades que pueden afectar el funcionamiento de la tiroides, entre ellas el Hipertiroidismo, donde hay una sobre producción de la hormona tiroidea y el Hipotiroidismo que es la condición de la cual vamos a hablar.

El hipotiroidismo es una condición en la que no hay suficiente hormona tiroidea para que el cuerpo funcione correctamente. Dado que cada célula necesita la hormona tiroidea para su función esencial, la insuficiencia de hormona tiroidea afectará a todas las funciones del cuerpo humano. Un síntoma común del hipotiroidismo es la desaceleración del metabolismo que a menudo resulta en un aumento de peso. También afecta a numerosos sistemas del cuerpo, como la digestión, el sistema nervioso central, el sistema cardiovascular (palpitaciones), el sistema pulmonar, la piel (resequedad), el crecimiento del cabello, la visión, la musculatura, el desarrollo fetal, el sistema reproductivo y el crecimiento óseo.

La causa más común de hipotiroidismo es la reducción del yodo. Sin embargo, en los países que tienen suficiente yodo en sus fuentes de alimentación, el 90% del hipotiroidismo se debe a la Tiroiditis de Hashimoto. Este trastorno hace que el cuerpo del paciente cree anticuerpos que atacan y destruyen lentamente la glándula tiroides, impidiendo finalmente que la tiroides sea capaz de crear suficiente hormona para un funcionamiento adecuado.

Para detectar y diferenciar el hipotiroidismo de una Tiroiditis de Hashimoto se deben realizar tanto pruebas de laboratorio como estudios radiológicos para diferenciar las mismas. Antes la TSH era considerada la prueba diagnóstica de las condiciones de la tiroides, pero muchos pacientes seguían presentando síntomas de hipotiroidismo con niveles de TSH normales. Por lo que se diseñó un panel tiroideo, el cual consiste en TSH, T3 y T4 libre y varios anticuerpos contra la tiroides además de niveles de yodo. El estudio radiológico de preferencia para notar cambios en morfología, irrigación y anomalías en la tiroides es la ecografía o sonograma.

Tiroiditis de Hashimoto

La tiroiditis de Hashimoto es una inflamación autoinmune crónica de la tiroides con infiltración de linfocitos. Los hallazgos incluyen el agrandamiento indoloro de la tiroides y los síntomas de hipotiroidismo. El diagnóstico implica la demostración de títulos altos de anticuerpos de peroxidasa tiroidea (TPO). En la tiroiditis de Hashimoto, el cuerpo crea anticuerpos que atacan el tejido tiroideo causando una inflamación que impide que la tiroides produzca hormonas de manera efectiva. Normalmente se requiere un reemplazo hormonal.

Se cree que la tiroiditis de Hashimoto es la causa más común de hipotiroidismo primario. Es varias veces más frecuente entre las mujeres. La incidencia aumenta con la edad y en pacientes con trastornos cromosómicos, incluido el síndrome de Down. La tiroiditis de Hashimoto, como la enfermedad de Graves, a veces se asocia con otros trastornos autoinmunes.

Síntomas y signos

Los pacientes se quejan de un agrandamiento indoloro de la tiroides o de opresión de la garganta. El examen físico revela un bocio (agrandamiento) no sensible que es liso o nodular. Muchos pacientes se presentan con síntomas de hipotiroidismo, pero algunos se presentan con hipertiroidismo.

Los síntomas más comunes:

-Aumento de peso -Fatiga

-Sensación de frio -Ansiedad

-Adormecimiento -Palpitaciones

-Dificultad para tragar -Perdida de cabello

-Piel seca -Dolores musculares

-Estreñimiento -Ronquera

-Perdida de deseo sexual

-Irregularidad de los ciclos menstruales

Tratamiento

Existen varias maneras para tratar tanto el hipotiroidismo como la Tiroiditis de Hashimoto. Ambas se basan en reemplazos hormonales. El mismo puede ser dado de manera natural o sintético. Para saber cuál es la opción adecuada como paciente, va a depender de las necesidades del paciente basadas en los análisis de laboratorio y las metas a corto y largo plazo que ambos se fijen. Es de vital importancia la relación médico- paciente para poder alcanzar un manejo adecuado y rápido de esta condición.

Puntos clave

- Ocasionalmente, el hipotiroidismo es transitorio, pero la mayoría de los pacientes requieren un reemplazo de la hormona tiroidea de por vida.

- La tiroides de Hashimoto es una inflamación autoinmune de la tiroides.

-Los pacientes a veces tienen otros trastornos autoinmunes.

-Los niveles de T4 y TSH son inicialmente normales, pero más tarde, la T4 disminuye y la TSH aumenta, y los pacientes se vuelven clínicamente hipotiroideos.

-Hay altos niveles de anticuerpos de peroxidasa de la tiroides y, menos comúnmente, de anticuerpos anti-tiroglobulina.

Ocasionalmente el hipotiroidismo puede ser transitorio pero la mayoría de los pacientes requieren reemplazo de la hormona tiroidea. Este reemplazo ayudara a balancear la función de la tiroides y por consiguiente la mejoría de los síntomas asociados a esta condición.

 

Dra. Damarys González Galicia

Medicina General y Preventiva

Medicina Ocupacional

bottom of page