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La fuerza del amor


Tengo la suerte, y la felicidad, de tener muchos amigos, Amigos a los que agradezco sus compañías, sus consejos, apoyo. Y muchos de esos amigos me hacen “el regalo” de enviarme información, artículos, documentación. Unos “regalos” que me ayudan a reflexionar, a enderezar, a veces, el rumbo de mi caminar, a escribir sobre un tema concreto.

Y hace unos días recibí un regalo insospechado: una carta de Albert Einstein, escrita hace muchos años y guardada otros muchos años en una universidad. Desconocía su existencia y… ¡el golpe de luz que recibí fue intenso, mucho! Reproduzco las palabras de Einstein a su hija. Vale la pena la reflexión personal sobre el mensaje que trasmite. Un mensaje escrito tras su experiencia en la vida y en la sabiduría.

A Lieserl Einstein.

Cuando propuse la teoría de la relatividad, muy pocos me entendieron, y lo que te revelaré ahora para que lo transmitas a la humanidad también chocará con la incomprensión y los perjuicios del mundo.

Te pido aun así, que la custodies todo el tiempo que sea necesario, años, décadas, hasta que la sociedad haya avanzado lo suficiente para acoger lo que te explico a continuación.

Hay una fuerza extremadamente poderosa para la que hasta ahora la ciencia no ha encontrado una explicación formal. Es una fuerza que incluye y gobierna a todas las otras, y que incluso está detrás de cualquier fenómeno que opera en el universo y aún no haya sido identificado por nosotros. Esta fuerza universal es el AMOR.

Cuando los científicos buscaban una teoría unificada del universo olvidaron la más invisible y poderosa de las fuerzas.

El Amor es Luz, dado que ilumina a quien lo da y lo recibe. El Amor es gravedad, porque hace que unas personas se sientan atraídas por otras. El Amor es potencia, porque multiplica lo mejor que tenemos, y permite que la humanidad no se extinga en su ciego egoísmo. El amor revela y desvela. Por amor se vive y se muere. El Amor es Dios, y Dios es Amor.

Esta fuerza lo explica todo y da sentido en mayúsculas a la vida. Ésta es la variable que hemos obviado durante demasiado tiempo, tal vez porque el amor nos da miedo, ya que es la única energía del universo que el ser humano no ha aprendido a manejar a su antojo.

Para dar visibilidad al amor, he hecho una simple sustitución en mi ecuación más célebre. Si en lugar de E= mc2 aceptamos que la energía para sanar el mundo puede obtenerse a través del amor multiplicado por la velocidad de la luz al cuadrado, llegaremos a la conclusión de que el amor es la fuerza más poderosa que existe, porque no tiene límites.

Tras el fracaso de la humanidad en el uso y control de las otras fuerzas del universo, que se han vuelto contra nosotros, es urgente que nos alimentemos de otra clase de energía. Si queremos que nuestra especie sobreviva, si nos proponemos encontrar un sentido a la vida, si queremos salvar el mundo y cada ser sintiente que en él habita, el amor es la única y la última respuesta.

Quizás aún no estemos preparados para fabricar una bomba de amor, un artefacto lo bastante potente para destruir todo el odio, el egoísmo y la avaricia que asolan el planeta. Sin embargo, cada individuo lleva en su interior un pequeño pero poderoso generador de amor cuya energía espera ser liberada.

Cuando aprendamos a dar y recibir esta energía universal, querida Lieserl, comprobaremos que el amor todo lo vence, todo lo trasciende y todo lo puede, porque el amor es la quinta esencia de la vida.

Lamento profundamente no haberte sabido expresar lo que alberga mi corazón, que ha latido silenciosamente por ti toda mi vida. Tal vez sea demasiado tarde para pedir perdón, pero como el tiempo es relativo, necesito decirte que te quiero y que gracias a ti he llegado a la última respuesta!.

Tu padre,

Albert Einstein

¡La Fuerza del Amor es la única fuerza capaz de cambiar el mundo! Quienes lean –y relean- las palabras del genio sacaran sus conclusiones. Las advierto, dicho sea, con el máximo respeto, que para ahondar en las palabras y en el mensaje es preciso recibir lo escrito en el más posible silencio interior; es decir, escuchar en nuestro interior únicamente lo leído, sin que nada nos distraiga se significado. Un silencio que nos ayudara, asimismo, a ser humildes y recibir la hondura del pensamiento de quien en su vida abrió los ojos a la verdad que le mostraba la naturaleza.

  • Nos empeñamos en cambiar la sociedad para que sea verdaderamente humana. Nos empeñamos en desterrar de la connivencia tantos sin valores que deforman la conducta, que nos deshumanizan. Importante empeño pero que será baldío si no tenemos en cuenta que la única fuerza que puede fundamentar los verdaderos valores y una convivencia humana es… ¡la fuerza del amor!

  • Queremos ayudar a que se respete la dignidad e igualdad de todas las personas. Así debe de ser porque es de justicia. Pero será posible alcanzar la meta anhelada si en las acciones y empeños ponemos el amor que todos ser humano merece de cada uno de nosotros. ¡La fuerza del Amor!

  • Y muchas más reflexiones que han surgido en el silencio interior con que he leído a Albert Einstein. Como punto final –y le dejo con sus propias reflexiones-... ¿se imaginan la explosión que se produciría en la sociedad si la Fuerza del Amor hiciera acto de presencia? ¡Ojalá así sea!

  • JOSE-ANTONIO BURRIEL DE SAN VICENTE Periodista, abogado y Doctor en Filosofía Experto en violencia contra las mujeres Valencia. España. 1937 Formador de los operadores en la atención a las mujeres víctimas de violencia Ponente en Jornadas, Seminarios y Congresos en el tema de la violencia sobre las mujeres Especial atención a los adolescentes ante sus relaciones afectivas Asesor en distintos proyectos europeos sobre violencia de género Presidente de la Asociación “No más violencia de Género”. Creador y director del Programa “Adolescentes sin violencia de género” Editor de las paginas “No más violencia de género” y “Adolescentes sin violencia de género” Articulista habitual en distintos medios de comunicación, y presencia en programas de radio y televisión. Premio nacional del Instituto de la mujer de España (2005) Reconocimiento del Gobierno de España (2015) por su trabajo en la erradicación de la violencia machista

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